Cinco cosas que no te pueden faltar en Brasil

1 - Asistencia al viajero

Es probable que te dejes estar hasta último momento con este tema, porque es lo menos divertido, pero quizás lo más necesario. Incluso hay gente que la descarta porque  "no me va a pasar nada", pero después ves cómo se le arruina el viaje ante el mínimo contratiempo, ya sea la pérdida de una valija o una inoportuna enfermedad, entre tantos inconvenientes que eventualmente puedan surgir.

Nosotros, para esta experiencia mundialista, tenemos el respaldo de Austral Assistance, una empresa creada y dirigida por médicos con más de 30 años de experiencia en el rubro de salud. Eso nos da la seguridad para encarar el viaje de manera despreocupada y solamente enfocándonos en lo que tenemos que hacer: tratar de justificar los puntos 2 y 3 de esta nota (?).

Si estás por ir a Brasil y todavía no tenés tu asistencia al viajero, te recomendamos consultar a la gente de www.australassistance.com. Si nos armaron un plan a nosotros, imaginate que para gente seria como vos, mucho más (?).

 

2 - Fernet

Tenés cerveza y un montón de tragos maracas para tomar en Brasil, pero te va a faltar algo fundamental: el fernet. Quizás no era un artículo de primera necesidad en los mundiales del 82 o el 86, pero desde que se transformó en una moda nos acostumbramos a escabiar Branca con Coca. O a lo sumo un 1882, pero nunca Pepsi. Lo más seguro es que no consigas fernet ni a palos en el vecino país. O capaz que conseguís, pero carísimo. ¿Para que te vas a andar arriesgando? Llevate una o dos botellas en la mochila, al menos para el primer día (?).

 

3 - Camisinhas

Tantos días fuera de tu casa te van a poner cariñoso, inevitablemente. Es por eso que tenés que estar preparado para cualquier situación. ¿Ponerla? Puede ser, obviamente no nosotros (?), pero en caso de terminar perdiendo el invicto en plena favela por un chiste sobre el gol de Caniggia no muy bien recibido, es coveniente tener protección. Nos vas a agradecer este consejo.

4 - Reales

Parece una obviedad, pero lo es (?). Si vas a pasar unos días a Brasil, aunque sean dos o tres, vas a necesitar un billete importante. Y ni se te ocurra llevar pesos, que no sirven para nada. En una casa de cambio están dando 1 de ellos cada 5 de los nuestros. Te vas a largar a llorar antes de que nos agarre Alemania. Mejor rescatá reales o (mucho mejor) dólares en alguna cueva de Argentina y sobreviví como puedas, macho, esto es un Mundial.

 

5 - Camisetas truchas

Nos gusta coleccionar camisetas originales y estamos totalmente en contra de la falsificación, pero acá está en juego nuestra argentinidad (?). Un clásico de todos los mundiales es intercambiar casacas con el rival. Ya sea en la cancha, en el fan fest o en la playa, la idea es divisar alguna prenda linda, rara, exótica o muy deseada, entablar una amistosa relación con el dueño y terminar en un telo arreglando un cambiazo, si es que a la contraparte también le interesó nuestro ejemplar.

Para llegar a buen puerto, lo más recomendable es que nuestra camiseta sea de Argentina o de algún club grande reconocido en el mundo entero. O sea, no vas a ser tan boludo de llevar una de Platense (?). Lo que nunca podés hacer es darle una camiseta original. Siempre, en cualquier circunstancia (salvo que se trate de un entendido en la materia) hay que entregar una réplica, de esas que están muy bien logradas. Es muy probable que el extranjero no se de cuenta. Y además, es muy factible que él también te esté dando una trucha. ¿O te pensás que los argentinos somos los únicos garcas?